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Sabores de Córdoba

Divertido, desenfadado, el vino generoso de fiesta: ¡Pale Cream!

Por Concha Torrecilla

Si hay un vino asociado a nuestras fiestas del mes de mayo sin duda es el Pale Cream, sinónimo de alegría y amistad.

Un vino generoso que desde su salida al mercado en la década de los noventa se ha convertido en el emblema de todas las ferias de la provincia, es el protagonista entre los más jóvenes. Un buen comienzo para iniciarse en los vinos de nuestra Denominación de Origen Montilla-Moriles.

El Pale Cream es un vino generoso de licor elaborado a partir de un vino de crianza biológica, en el caso de la D.O. Montilla Moriles procede de un fino, al que se ha adicionado mosto concentrado rectificado para darle un toque de dulzor que aminore la sensación secante original de los vinos finos, todo el azúcar del mosto proviene sólo de la uva. También está autorizado el uso de vino dulce natural, Pedro Ximénez, en lugar de mosto concentrado, pero es preferible este último para mantener su color pálido original y aromas de crianza. El resultado un vino entre 45 y 115 gramos de azúcar por litro.

De color amarillo pajizo a dorado pálido y aroma floral, hierba seca, fruta en compota, en algunos un toque de panadería procedente de la crianza biológica. En la boca son vinos de entrada muy agradable, delicado sabor dulce, que reduce la sequedad y el amargor propio del vino base bajo velo de flor. Su contenido alcohólico puede variar de los 15-22º vol.

Recomiendo tomarlo bien frío 7- 9ºC, siempre en copa o vaso grande con hielo.

En la actualidad son numerosas las bodegas en el marco de Montilla-Moriles que elaboran Pale Cream con distintas marcas, entre ellas: Alvear, Bodegas Luque, Bodegas Navarro, Bodegas Robles, Coop. Agricola La Aurora, Perez Barquero, A. Doblas Martos, Bodegas San Pablo, Bodegas y Destilerias del Sur.

En estos días que las fiestas y ferias se posponen para mejores momentos, el vino de fiesta también puede disfrutarse en casa.

 ¡Salud!